La importancia de la vitamina D en la actualidad

La vitamina D es una vitamina liposoluble, es decir, que puede disolverse en grasa, pero no en agua, por lo que se almacena en el tejido graso del cuerpo.

Esta se puede obtener a través de tres formas:

• Piel. A través los rayos del sol. Es la principal fuente. Sin embargo, la radiación ultravioleta en exceso no es segura, ya que, puede provocar cáncer de piel, por lo que se recomienda conseguir vitamina D a través de otras fuentes.
• Alimentación. Se puede conseguir mediante el consumo de pescado azul (salmón, atún, sardinas…), los aceites de hígado de pescado, la yema del huevo y el hígado de ternera, entre otros. Además, ciertos alimentos como los lácteos y cereales pueden estar fortificados con vitamina D.
• Suplementos.

En la actualidad, se ha visto muy extendida la deficiencia de vitamina D a nivel mundial, sobre todo, en los meses de invierno, donde la exposición al sol es menor.
En España, el déficit de vitamina D es semejante a los descritos para Europa Central o Escandinavia. A modo especulativo, se ha tratado de explicar que hay un aporte dietético bajo de esta y no puede ser compensado por la síntesis cutánea. Además, los españoles que tengan la piel más oscura tienen más dificultad de síntesis de vitamina D.
Esta deficiencia de vitamina D se encuentra sobre todo en mujeres postmenopáusicas y en ancianos.

Otra de las causas por la que puede existir déficit de vitamina D son enfermedades que incapacitan la absorción de esta (celiaquía, enfermedad de Crohn, fibrosis quística y cirugías). También se produce cuando se limita la capacidad de procesar la vitamina D a causa de enfermedades crónicas del riñón o hígado. O bien, por falta de enzimas o sustancias, necesarias para su metabolización.

Funciones de la vitamina D

La función principal de esta es ayudar al cuerpo a absorber el calcio de la alimentación y mantenerlo en el hueso. No solo es, también ayuda a proteger a nivel cardiovascular y es necesaria para el correcto funcionamiento de nuestro cerebro y el sistema inmune.

Síntomas de déficit de vitamina D

La mayoría de las personas no presentan síntomas. Puede haber casos más avanzados en el que aparecen fracturas o deformidades frecuentes debido a que los huesos de vuelven más blandos y frágiles.

También puede haber dolores óseos, musculares o calambres. Ello puede favorecer la probabilidad de sufrir caídas y osteoporosis.

Por último, y en casos extremos, puede aparecer raquitismo (en la infancia) u osteomalacia (en la edad adulta). Aunque es poco común en los países desarrollados.

Prevención de vitamina D

La prevención de déficit de vitamina D se puede conseguir a través de la alimentación y la exposición al sol adecuada y sin excesos.

Alimentos con mayor contenido en vitamina D (ordenados de mayor a menor)

Tratamiento por déficit de vitamina D

Se realiza a través de fármacos y suplementos de vitamina D.

Los tipos de tratamiento y la dosis de suplementación deben ser indicados por el médico, ya que,  dependen de la fisiología y el tipo de patologías que pueda tener cada persona. Así como, la medicación que tome.

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