En la consulta existe cierta confusión entre el kéfir y el yogur debido a que tienen bastantes similitudes.
El kéfir está compuesto sobre todo por gránulos que fermentan en un medio que suele ser leche o agua. Por ello, la textura del kéfir es más líquida que la del yogur.
También, son alimentos probióticos, es decir, han sufrido un proceso de fermentación, pero se diferencian en el tipo de microorganismos que se emplean para elaborar cada producto. Un alimento probiótico puede ejercer un efecto positivo en nuestra microbiota intestinal.
Para la elaboración del kéfir, se utiliza una mezcla de bacterias y levaduras, entre otros. La variedad de microorganismos que actúan en su fermentación es más amplia. En el yogur, se usan solo 2 tipos de bacterias de las familias Lactobacillus bulgaricus y Streptococcus thermophilus.
Por lo tanto, su elaboración es diferente y no intervienen los mismos microorganismos. Lo ideal es ir alternando los dos
¿Qué kéfir puedo escoger en mi compra?
Cuando escojamos entre estos productos en el supermercado debemos fijarnos bien en la etiqueta, puesto que no todos los productos son iguales. Por ejemplo, con el kéfir de leche es preferible que como ingredientes lleve leche pasteurizada, fermentos lácticos y natural, ya que, si los escogemos de sabores, puede que hayan añadido azúcares. Sin embargo, si elegimos kéfir de agua, habrá una pequeña parte de azúcar en su composición debido a que hay que añadirlo para elaborarlo. En el caso del kéfir de leche lo que se fermenta es el propio azúcar de la leche, la lactosa. Lo ideal es que no contenga azúcares añadidos.
¿Cómo puedo incorporar estos productos en mi alimentación?
Los dos productos tienen un uso muy similar. Se pueden mezclar con canela, frutos secos naturales o tostados, semillas y/o frutas. A continuación, te expongo algunas ideas de recetas sencillas con estos:
- Batido de kéfir con fresas y plátano.
- Bol de avena con kéfir, mango y chocolate negro.
- Bol de yogur con anacardos, kiwi y canela.
- Pudin de kéfir con chía y frambuesas.
- Yogur helado con arándanos y pepitas de chocolate negro.
- Bol de kéfir con crema de arroz y fresas.
- Bol de yogur con crema de cacahuete o cacahuete desgrasado en polvo, manzana y copos de avena.
- Smoothie de sandía y kéfir con nueces.
- Helado de kéfir con cerezas y nueces.
- Tortitas de avena, plátano y yogur.
Espero que te sirva y te ayude.
0 comentarios