Con la llegada del buen tiempo quizás nos apetezca un helado fresquito. Elaborando los nuestros propios, con nutrientes frescos y de calidad, y evitando el exceso de azúcares, podemos conseguir una alternativa apetecible, saludable y refrescante. ¿Qué se necesita? En realidad, con un poco de nuestra imaginación y en función de nuestros gustos podemos tener grandes ideas, existe amplia variedad para poder hacerlos. No obstante, aquí os dejo algunas pautas sencillas para podáis empezar:
  • Las frutas. Cualquier fruta es buena para poder preparar un helado, polo, granizado o sorbete. Lo ideal es elegir frutas de temporada por su calidad nutricional y sensorial. Igualmente, es recomendable que la fruta esté en su estado óptimo de maduración. Las frutas más utilizadas para elaborar estos suelen ser: el mango, el plátano, la piña, los frutos rojos, las fresas, el limón, la naranja, la sandía, el melón, etc.
  • Grasas y proteínas de calidad. Lejos de las grasas trans o productos con alto índice de grasas saturadas como los productos comerciales, podemos optar por otros como la crema de cacahuete o frutos secos, la leche, el yogur natural o griego, las bebidas vegetales, el queso batido fresco, y así, poder dar sabor, cremosidad y diferentes texturas a nuestros helados.
  • Toppings. También podemos agregar a nuestros helados ingredientes como: trocitos de fruta fresca o desecada, cacao puro (en polvo, en pepitas o rallado), coco rallado, semillas, frutos secos, hierbas y especias (canela, cúrcuma molida, menta, hierbabuena, anís), cereales integrales, muesli, etc.
4 ideas irresistibles Con todo lo que se ha explicado anteriormente seguro que a más de uno/a se le ocurren miles de recetas para elaborar, pero, si no es así, hoy te presento 4 ideas de helados caseros para que los disfrutes: 1. Polos de mango. El mango es una fruta muy dulce que puede combinar muy bien en estas recetas. Se pueden hacer polos de: -Mango, plátano y frambuesas. Para esta receta será necesario elaborar un batido con naranja, mango, plátano, frambuesas y un poco de esencia de vainilla. No obstante, dejaremos algunos trozos de las frutas anteriores apartadas para añadirlas posteriormente. Cuando tengamos todo, incorporamos en el molde el batido con los trozos de fruta, congelamos y ¡a disfrutar! –Mango y yogur. Para esta elaboración necesitaremos yogur griego, mango, un poco de bebida vegetal de coco, una pizca de canela y lo batimos todo. Igualmente, podemos hacer trocitos de mango pequeños para agregar luego junto con lo que hemos batido. Una vez que tenemos todo, lo incorporamos en los moldes, lo metemos en el congelador y a esperar para disfrutar de estos. 2. Polos limón o naranja y fresa. Para la preparación de estos será necesario: bebida vegetal (puede ser al gusto, aunque con la de coco o la de almendras queda delicioso), que mezclaremos con zumo natural de naranja o limón y zumo natural de otras frutas. Por otro lado, necesitaremos limpiar las frutas y congelarlas en trocitos. Una vez preparados todos los ingredientes, cogemos los moldes de los helados, y si los queremos hacer con rayas de colores primeramente hay que echar un tercio del zumo de cítricos o del otro zumo con trocitos de fresa y se congela. Más adelante se echa otro poco del zumo que no hayamos incorporado anteriormente, otra pequeña cantidad de trozos de fresa y se vuelve a hacer lo mismo. Por último, se termina agregando el zumo que hemos puesto al principio con los trozos de fresa que queden, se vuelve a meter en el congelador y en unas horas podremos disfrutar de nuestro delicioso polo. Nota: A estos también se les puede añadir otras alternativas como el kiwi, los arándanos, la piña, etc. 3. Helados. Para preparar estos podemos utilizar bebida vegetal de coco, yogur griego, yogur natural edulcorado o queso batido fresco y mezclarlo con frutas. Se tienen que seguir los pasos que hemos visto en los apartados anteriores: limpiamos y trituramos las frutas, aunque, también se pueden dejar algunos trozos para agregarlos posteriormente a nuestra mezcla. Con el batido que nos ha quedado, lo mezclamos con el derivado lácteo que más nos guste y posteriormente, los trozos de fruta y a congelar. Algunos ejemplos de estos pueden ser: -Helado de piña y coco: elaborado con bebida vegetal de coco y ralladura de coco como topping. -Helado de frutos rojos, cerezas y yogur: preparando la mezcla con yogur natural. -Helado de fresas con nueces: utilizando un plátano para mejorar la textura, bebida vegetal (al gusto: de coco, soja, almendras, avena…), un poco de limón, queso batido fresco y nueces. Opcionalmente, también se puede añadir algunas pepitos de chocolate puro. -Helado de plátano y canela: mezclando esta fruta bien madura con bebida vegetal de coco, yogur natural o queso batido fresco (lo que más nos guste), un poco de canela y esencia de vainilla. 4. Sorbetes. La diferencia principal con respecto a los anteriores es que se prepara principalmente con frutas y suelen ser más ligeros. Por otro lado, son elaboraciones semi-heladas y más líquidas. Al igual que los anteriores, primeramente se tienen que limpiar y trocear la fruta y posteriormente congelarla. Podemos hacer: -Sorbete de plátano y fresas. Siguiendo los pasos anteriores y añadiendo a los ingredientes un poco de limón y agua, metemos el batido elaborado a congelar y cuando esté casi congelado lo sacamos y volvemos a batir, lo guardamos de nuevo en el congelador y repetimos el mismo proceso 2 o 3 veces cuidando de que no se congele del todo. -Sorbete de mango y naranja. Lo preparamos con zumo de naranja natural y lo batimos junto con trozos de mango congelados. Posteriormente, volvemos a seguir los pasos de la receta anterior (lo congelamos y lo batimos varias veces). Cuando esté listo, agregamos un poco de menta o hierbabuena y ¡listo!
Espero que os hayan gustado todas estas ideas y espero que las podáis poner en práctica. Sin duda, ¡Se puede disfrutar del verano comiendo sano!

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